David. Pecador y creyente

He aquí una recopilación de las meditaciones y homilías pronunciadas por el cardenal Martini durante unos "Ejercicios" que predicó a los jesuitas y otros misioneros y misioneras de la república del Tchad en julio de 1988. Los "Ejercicios" son, para quien los hace, un episodio de la historia de la salvación, y por eso existe una íntima relación entre "Ejercicios" y Biblia.

Siguiendo el método propuesto por Ignacio de Loyola en sus Ejercicios Espirituales, el cardenal Martini reflexiona sobre la figura del rey David para profundizar en el conocimiento del designio salvífico de Dios que resplandece en Jesucristo.

El olvidar el Antiguo Testamento tiene siempre el peligro de desembocar en la visión de un Jesús fuera de la historia, e impide contemplar al verdadero Jesucristo, Señor de nuestra vida y de la vida de toda la humanidad. Para comprender a Jesús y su Evangelio debemos conocer sus antecedentes veterotestamentarios. En este sentido son especialmente significativos los títulos de las meditaciones del cardenal. Poco a poco, el ejercitante se encariña con la figura de David, hombre según el corazón de Dios, no por su moralidad superior, sino por su fe y su obediencia al Señor, por su sentido de la santidad trascendente de Dios.

El estilo de las meditaciones es sumamente familiar y sencillo, lo cual aumenta el interés del libro, que puede ayudar a cualquier cristiano a comprenderse a sí mismo en relación al pueblo hebreo y a reconocer su deficiente asimilación a la persona y al mensaje de Cristo, a pesar de haber recibido la gracia del bautismo.

0,00 €
Impuestos incluidos
0,00 €
Cantidad
Cantidad
No hay suficientes productos en stock

Gastos de envío (Estados Unidos)

DHL (Internacional): 30,00 €

Con seguimiento de pedido.

Pagos 100% seguros

Ficha técnica

He aquí una recopilación de las meditaciones y homilías pronunciadas por el cardenal Martini durante unos "Ejercicios" que predicó a los jesuitas y otros misioneros y misioneras de la república del Tchad en julio de 1988. Los "Ejercicios" son, para quien los hace, un episodio de la historia de la salvación, y por eso existe una íntima relación entre "Ejercicios" y Biblia.

Siguiendo el método propuesto por Ignacio de Loyola en sus Ejercicios Espirituales, el cardenal Martini reflexiona sobre la figura del rey David para profundizar en el conocimiento del designio salvífico de Dios que resplandece en Jesucristo.

El olvidar el Antiguo Testamento tiene siempre el peligro de desembocar en la visión de un Jesús fuera de la historia, e impide contemplar al verdadero Jesucristo, Señor de nuestra vida y de la vida de toda la humanidad. Para comprender a Jesús y su Evangelio debemos conocer sus antecedentes veterotestamentarios. En este sentido son especialmente significativos los títulos de las meditaciones del cardenal. Poco a poco, el ejercitante se encariña con la figura de David, hombre según el corazón de Dios, no por su moralidad superior, sino por su fe y su obediencia al Señor, por su sentido de la santidad trascendente de Dios.

El estilo de las meditaciones es sumamente familiar y sencillo, lo cual aumenta el interés del libro, que puede ayudar a cualquier cristiano a comprenderse a sí mismo en relación al pueblo hebreo y a reconocer su deficiente asimilación a la persona y al mensaje de Cristo, a pesar de haber recibido la gracia del bautismo.